Nuestras grandes maestras herbolarias
Las personas y las plantas han coexistido desde siempre, por lo que resulta natural la relación entre las dos. En la época prehispánica tuvo lugar la medicina tradicional, esta especie de oficio que tenía como objetivo mejorar la salud de la comunidad con los recursos que se tenían a la mano, los cuales provenían sobre todo de la tierra.
La herbolaria es una técnica milenaria que pretende conjuntar la botánica y la medicina. Como ya hemos dicho, es un recurso al alcance de cualquiera. Después de todo, ¿quién no tiene plantas a la vuelta de la esquina?
Herbolaria, regalo ancestral
Las personas dedicadas al trabajo con las plantas han transmitido su conocimiento a través de la oralidad y la escritura, pero sobre todo de las prácticas que realizan. Parteras, sobadoras, chamanas, curanderas, hueseras, hierberas y figuras similares han compartido su sabiduría generación tras generación haciendo posible que incluso en estos tiempos existan expertas y expertos en el tema.
En algunos códices de las culturas antiguas, como el Códice de la Cruz Badiano y el Códice Florentino, se tiene registro del camino que recorrieron nuestros ancestros en este aspecto. En ambos podemos encontrar información sobre las plantas y sus propiedades, sobre remedios, preparaciones y aplicaciones, y en general sobre el uso medicinal que se le daba a la naturaleza.
También podemos encontrar información sobre el desarrollo de esta sabiduría y a grandes rasgos sobre su cosmovisión. Algo muy interesante es que las plantas cumplían un papel súper importante en la cotidianidad, que además eran parte de su identidad.
Las plantas medicinales hoy
Aunque no lo parezca, hoy en día seguimos utilizando las plantas en muchos aspectos de nuestra vida. Hay algunos bastante obvios, como la gastronomía, pero también muchos que ni siquiera imaginábamos. Según Tlayeyecolpahtli, libro publicado por el Institucio Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) “nuestro país cuenta (...) con 3,352 especies de uso medicinal registradas en el herbario medicinal (IMSS) y se estima que pueda ascender a 4,500 o 5,000 tomando en cuenta familia, género y especie de cada planta” (Fernández, M. y Erasto, F., 2021: 1).
Actualmente, y nos atrevemos a decir que gracias a los ancestros herbolarios, existen lugares especializados en el estudio y la investigación de las plantas medicinales. También existen aplicaciones que están más a nuestro alcance y que podemos transmitir al menos en nuestro núcleo más cercano. Queremos hablarte brevemente sobre ellas y regalarte una receta sencilla que nos heredó una de nuestras maestras favoritas.
Baños, infusiones, cocciones, extractos, tinturas, macerados, vinos, jarabes, mieles, vaporizaciones, cataplasmas y ungüentos son algunas de las formas en que podemos obtener las propiedades de las plantas y absorber sus beneficios. Es mucha la bibliografía que ahonda en el tema y que hace una revisión exhaustiva de las plantas, sus partes y sus posibles usos.
Para enaltecer este conocimiento ancestral queremos regalarte una receta rápida y efectiva que puedes hacer desde tu casa. Sólo necesitas flores secas de lavanda, aceite de girasol, cera de abeja y, si quieres, aceite esencial.
Infusiona 9 gramos de lavanda y 125 ml. de aceite de girasol y revuelve. Después, en un contenedor, coloca 45 mililitros de la infusión y 9 gramos de cera de abeja. Deja reposar a baño maría para que se derrita, mezcla y, para finalizar, agrega unas gotitas de aceite esencial -también de lavanda-. Pon el resultado en un tubo y, cuando endurezca, utiliza para calmar las molestias ocasionadas por las mordeduras de los insectos. Ahora que si quieres evitarlas te recomendamos nuestro magnífico repelente de eucalipto.
Recordemos que estos aprendizajes vienen de años atrás, que son un legado. Gracias a las mujeres que han compartido a través de la enseñanza sus conocimientos seguimos aprendiendo y compartiendo. A ellas y a todos los demás que cumplen con esta noble labor, felicidades en su día.
Puedes conocer más de algunas de las maestras herbolarias más reconocidas de México si das clic AQUÍ. Preparamos un documento que pretende honrar la labor de las increíbles mujeres que a lo largo del tiempo han compartido el conocimiento que tienen sobre las plantas medicinales y su gran poder curativo.